
Hoy por la mañana, me desperté un poco asustada porque me dormí, sin sentir llegar a Germán que estaba en el campus que había carnaval, cerca de la una cuando le abri a Anto que no tenia llave y llegaba recién de trabajar aun no había llegado.A pesar que estoy comenzando a acostumbrarme a sus salidas siempre estoy como atenta y nerviosa esperando sentir su llegada, pero anoche me dormí profundamente.Me levante directo a ver si estabas, preocupada por mi omisión, y veo el cuarto de mi hija acomodado y sin ella, se me prendió una alarma en la cabeza, sigo mi viaje abro cuidadosamente la puerta y allí estaban los dos. No saben la alegría duplicada que tuve, primero claro los estaban bien y en casa y segundo me recordó cuando eran niños que se pasaban, hacia tiempo no sucedía, los colchones en el piso de los dos frente a la tele.Ni me sintieron de aleje contenta silenciosamente .
Es lo que toda una madre desea, que sus hijos se lleven bien,Que linda sensación me dio.Al mismo tiempo que una tranquilidad, porque hasta las peleas diurnas que mantienen cada dos por tres sin darse cuenta van formando lazos, estableciendo limites, y aprendiendo a amarse y a respetarse.Hoy me siento mas segura que nunca estarán solos, porque mas allá de los lazos de sangre que los unen, y de lo diferentes que son, saben que pueden confiar uno en otro y que siempre sera asi.
Son esos días que uno anda mas alegre por la vida.
Estela Albini para mis hijos
egamfer









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