lunes, 14 de junio de 2010

Motos

Muchas madres seguro me emprenderán, el tener tanto miedo cuando nuestros hijos circulan en moto.
Recibir la noticia del accidente es el peor momento, el corazón se sale por la boca, Germán me paso el mensaje y al llamar nerviosa, escuchar su voz, que no fue nada, me tranquilizo un poco.
Mas la impresión al llegar con el cuello ortopédico puesto y sobre una tabla, me hizo saltar el corazón, mil cosas en la cabeza.Por suerte el medico ante mi cara me dijo que solo era perención, en los nervios aun le di algún rezongo por la moto, temblaba como hojita, de nervios, de frió
Mi presencia le dio un poco de calor, vinieron las curaciones, las placas, el especialista.
La calvícula fisurada, unos cuantos moretones y algunos raspones fue lo que se llevo.
Ha pasado una semana ya , una semana de dolores, muchos analgésicos.
Es mi niña muy fuerte, no derramo una lágrima, enfrento toda al situación con una entereza que en el fondo un poco me sorprendió.
Estos dias nos han servido sin embargo, hemos pasado tiempo juntas, ella termina limpita y en pijama y yo mojada en cada baño pero siento como una nueva union entre las dos, que un poco se habia perdido, hemos vuelto a reir juntas, los ultimos meses entre su caprichos y mis exigencias nuestra union se habia debilitado.Por supuesto es de esperarse que no sucedan estas cosas, pero de algo malo logramos sacar algo bueno.
No quiero entrar en enseñansas de esas que te cansan, hoy solamente dar gracias de que solo fue un susto.
Todo mi amor para ti.
Mama




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